nada más llegar, el personal se ocupada de tu maleta y te acompaña para hacer el check-in (hacen un trabajo muy eficiente)... pocos minutos más tarde, un botones te enseña la habitación (con vistas preciosos) y poco después llega tu maleta (otro botones)..
habitaciones limpias, ventanas grandes, baño bien equipado (gran ducha, pero sin bañera).
todo perfecto! ah... y la piscina "infinity" en la planta 14! genial!
si encuentras un buen precio, este hotel esta genial, y muy bien comunicado con el skytrain.
(eso sí, es en un lugar de oficinas sin vida... aunque justo enfrente se encuentra the elephant, un restaurante conocido y que además ofrece cursos de cocina).