Es un hotel confortable de reciente costrucción, el servicio es muy atento y agrdable.
Está conectado por una pasarela con la estación del BTS (Skytrain), lo que te permite llegar directamente desde el aeropuerto por tren en lugar de tener que tomar un taxi que es mucho mas caro y con el tráfico de Bangkok se tarda el doble.
Tiene una fantastica piscina infinita en el piso 14 y cuando estuvimos no habia apenas gente.
El buffet del desayuno era muy completo con productos occidentales y orientales y buena bollería/pastelería.